¿Qué somos? Esa sociedad que no tiene memoria histórica. ¿Estamos condenados a seguir con el subdesarrollo por los siglos de los siglos? Hace algunos días viajaba en una de las salidas de la capital guatemalteca. Y veía las panorámicas donde anuncian a un candidato a la alcaldía municipal. Que ahora no me vengan con que eso no es propaganda disfrazada, que no tengo un solo cabello de tonto. Dice, hablemos con Alejandro Sinibaldi ¿para qué diablos quiero hablar con un tipo perteneciente a la oligarquía de este país? Esas poses mesiánicas realmente dan pena. Pero solo en este país de corrupción e impunidad se puede dar. Y lo más triste es que vemos con indiferencia estas aberraciones mediáticas.
Toda esta gente, en panorámicas, con colores del partido, promoviendo la imagen de un tipo, y sobre ellos proponiendo populismo barato, con poses divinas solo pasa en caricaturas elaboradas en países del tercer mudo. A la larga la población parece no darse cuenta, que este tipo de actitudes, donde la ley no es más que para beneficios personales, son los que nos mantienen sumergidos en pleno subdesarrollo. ¿Realmente queremos más gobernantes así? Ese tipo de país queremos heredar a las nuevas generaciones.
Por siglos la oligarquía de este país ha quitado y puesto presidentes y gobernantes. Siempre han gobernado a su antojo. Porque nos ven con ojos de patrones. Así como sus peones. Ya que no conocen otra Guatemala, más allá de sus intereses. Por ello proponen este tipo de estrategias. Donde pretenden ser mesiánicos, los que se creen ungidos para salvar este país.
Realmente la realidad nacional es un sumidero de tonterías y decepciones. Es un circo completo. Una farsa elaborada para la campaña electoral. Y seguiremos viendo este tipo de tonterías llenas de fanatismo y por supuesto de un inconmensurable populismo.
El país da pena. Se muere ya que carece de líderes, que le digan las verdades a la gente que quiere hacer de este país su hacienda. Que piensan que todos somos sus sirvientes, a quienes les pueden resolver sus problemas. Puedo decirles, regresen a cuidar sus vacas a la costa sur. Tierras obtenidas de la explotación del campesino guatemalteco indígena. Guatemala tiene problemas reales que no se solucionan con su competencia de popularidad.
A los años voltearemos a estos días. Y nos daremos cuenta que hemos perdido muchos años gobernados por los mismos que nos han mostrado su grado de ineptitud nacional. Políticos de pacotilla, militares de guerra fría, empresarios de la edad media.
Simplemente los problemas de Guatemala no se solucionan de la noche a la mañana. Se soluciona cuando nosotros nos demos cuenta que estamos siendo gobernados por un puño de políticos con el ego inflado, que además de hacer tonterías creen que hacen lo mejor. Este país cambiará cuando usted y yo dejemos de darle poder a un grupo de hombres blancos, de bien, que piensan que las cosas, solo dios las arreglará. Guatemala, gracias a ellos es una caricatura horrenda de impunidad y errores generacionales.
Por ello, ¿para qué diablos quiero hablar con la oligarquía? Simplemente para darme cuenta que este país al mando de todos estos dinosaurios, no tiene salvación. O en el peor de los casos, muchos idiotas eligen a sus gobernantes.
Ángel Elías
Comentarios
Estimado Koan, así nos damos cuenta el tipo de historia que tenemos. Hablar es fácil, decir que Gaute es linda y que no hay nada como ella, es cierto es fácil. Lo duro es darse cuenta en qué tipo de país vivimos.
Hacer algo, ¡Claro! ya dejemos que ellos se crean la salvación de este país. Que nos vean la cara de tontos. Con eso ya tenemos como empezar.
saludos, Mariana
Carmen: espero que no sea la última vez que vengas je... y agradecele a tu amiga por recomendarme
un fuerte abrazo