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Mostrando las entradas de 2014

Los miedos

Los miedos son aquellos monstros que nos acorralan en cada momento y saltan para asustarnos en el momento menos indicado. Pero son inofensivos, hasta el punto que nosotros le demos la oportunidad de entrar a nuestras almas. ¿Somos seres que tememos?, algunas veces infundimos más miedo de lo que pensamos.

La oscuridad de la guerra

La primera vez que recuerdo que escuché sobre la guerra en Guatemala fue a los cinco años, un día hubo un apagón durante la cena familia y a la luz de las velas aparecieron las historias de desapariciones. Sé que parece escalofriante la escena y lo fue, se hablaba en voz baja de lo que sucedió y como si fuera un secreto que no se quería que se supiera.  Esa es la imagen más certera que tengo de la guerra, un momento de secretos, misterios y oscuridad, en el cual nada era revelado y solo existía durante los peores momentos, en este caso cuando la energía eléctrica desaparecía. Mis tíos comentaban sus experiencias en Chimaltenango, y Quiché, de su milagrosa forma de sobrevivir, de quienes no lo hicieron, esas historias marcaron mi vida. Porque por momentos pareciera que no existiera esa parte de la vida del país y efectivamente eso quisieron durante muchos años. Al otro día los relatos ya no existían, era como si no habían contado nada, no se mencionaba nada de lo co

Soy indígena

En mi niñez jamás me pregunté por mi etnicidad, bueno creo que pocos niños lo hacen. No fue como un asunto prioritario eso de entender la cultura y el origen cosmogónico de donde provengo. Mi abuela tenía rituales indígenas y me curaron en varias ocasiones de mal de ojo, mi abuela paterna hablaba en kaqchikel y mis padres sabían algunas palabras. A mí, para esa edad todo me parecía de lo más normal, pensaba que todo funcionaba igual, ¿qué era yo? Un habitante más, ni menos, ni más. En la escuela hicieron un censo en el   que nos preguntaron sobre nuestro origen étnico. Levanten la mano los indígenas, dijo la maestra. No supe qué hacer, no porque me identificara, sino porque nunca me hice esa pregunta, francamente. La maestra me vio y dijo: indígena. Ese fue como mi primer encuentro con el querer conocer más sobre el asunto étnico. Decirse indígena o no, no debe ser como una etiqueta que lo haga mejor a uno, eso me enseñaron en casa. Crecí con ese concepto hasta que me

Texto Zip XXXVI

Tal vez verla aquella tarde no dice mucho. Ambos estábamos en el noveno piso de un edificio que más parecía que se caería en cualquier momento, por efecto de las polillas “comeconcreto”. No dice mucho que aquella noche nos encontramos en un correo electrónico. Menos cuando compartimos un poco de agua en verano, en aquella calle llena de extraños. Nada de eso me dice nada. Me vuelca de recuerdos tu vestido largo y tu sonrisa dibujada como cuando le hacíamos caritas al sol en los dibujos de primaria. ¿Quién te dibujó a ti? ¿Quién tuvo ese atino de recrear mis bosquejos en la preprimaria? Eres esa estrella que tenía goma y brillantina en un papel, obra maestra a mis 4 años de edad que colgaba en el refri de la casa. Eso me dice todo. Me dice todo tu cuerpo en la cama, contando tus heroicas aventuras. ¿Hay algo más emocionante que encontrar cada recuerdo en las esquinas de la calle? Vamos sé que es difícil explicar que la vida se derrama en cada encuentro con el pasado. Pe