Ir al contenido principal

Apofonía XI

Beso: ese encuentro raro y único cuando la mente se conjuga en el corazón para realizar un acto igual de extraño.

Olvido: una carta escrita y que no queremos recordad a dónde la enviamos, y que con el paso del tiempo no dejamos de esperar una respuesta del destinatario.

Soborno: y me ofreciste tus labios y no resistí a entregarte el corazón

Música: lo que aleja los pensamientos oscuros, como la tristeza, por ejemplo.

Fenómeno: eso fue lo que me cautivó de ti, tenías la cualidad de convertir lo ordinario en extraordinario.

Despedida: las personas que queremos, no se despiden como deseamos. Solo se van, sin voltear a ver. Es lo mejor, nadie quiere que lo vean llorando.

Nuevos amores: nuestros viejos amores, consiguen nuevos amores, con viejos sentimientos y nuevas heridas, con viejas anécdotas y nuevos problemas, con viejas aventuras y nuevos besos. Nosotros quedamos en los viejos de ellos y en los nuevos de los otros.

Ella: claro, tengo que escribir de ella, pero no puedo, porque lo haría despedazándome, dejando parte del mundo desperdigado en una pared llena de perdigones. Ella lo sabe y guarda silencio. Cree que eso es suficiente. Yo quiero creer eso también.

Calzada: todo puede recordarte amigos, familiares, amores lejanos. Una calzada que te lleva a ninguna parte puede devolverte muchos años atrás y  entonces la calle se vuelve el cassette de la vida, con sonidos y voces que se creían perdidos en el tiempo.

Lluvia: no hay con quien compartir la lluvia. Solo con 3 millones de gentes que no les importa la lluvia. Hay alguien que hace la diferencia allí afuera. Escucha la música de la lluvia con encanto especial. A pocos kilómetros, yo dejo correr la lluvia en los tejados.

Sol: el solo sale después de la lluvia y deja que el vapor suba desde los tejados al cielo. Los gatos tratan de atrapar con sus garras el aliento de la ciudad.

Tú: lees estas líneas, temes que hablen de ti. Que devele los secretos que no quisiste revelar, por vergüenza o por misterio, quién sabe. No es tiempo, aunque en este estado, dejando a un lado los dramas, creo sería un acto muy justo.

Ángel Elías 

Comentarios

Entradas más populares de este blog

APOCALYPTO.

Mi buen amigo Guillermo, escribió un artículo interesantísimo. Le Concedo el espacio ya que es un excelente material. ¡¡¡Que lo Disfruten!!! Mel Gibson’s montó una película cuya argumentación es una pura y simple extrapolación de algunos pocos hechos históricos de una sociedad que el cineasta llama Maya, pero que en realidad no corresponde, ni por las escenarios arquitectónicos, ni por el vestuario, ni la utilería, ni por las manifestaciones de la vida cotidiana de los pueblos mayas descritos por los cronistas españoles, sobre todo curas, a finales del siglo XVI. Y por otro lado, dada la tendencia de Gibson’s a magnificar lo sangriento, las bajas pasiones, con el fin de impactar a un público cinófilo ávido de violencia escénica, sediento de actos necrófilos, convierte el film en una desagradable y, a veces repulsiva, ficción del salvajismo de los humanos. La historia negra de l

Crónica de amores efímeros.

Un mes de montaña rusa. No apto para cardíacos. Mucho menos para mí, añejo corazón. Desde noviembre las cosas cambiaron. Un mes que se perfilaba como normal toma un giro inesperado con una invitación, insospechada. Que al final terminó siendo el zarpazo final. Aunque en eso de los enamoramientos las cosas son así, un zarpazo en el momento menos esperado. Y luego nada, así de simple es la vida, un tumulto de arbitrariedades en contra de un longevo corazón y después el silencio. Y no es que quisiera una fiesta, sino que simplemente no me esperaba un silencio así. Espectral y sonámbulo, como programado. Ahora ella parte, sin más ni más. Y no voy a hacer nada por evitarlo. Nunca haría algo así. Porque somos vidas completamente distintas, separadas. Y desde el principio de los tiempos fue así. Que por alguna extraña razón hayamos coincidido en un espacio idéntico, no significa que nos perteneciéramos. Aunque todavía me sonrío en nuestro primer encuentro, donde su tibieza me conmocionó. Tení

Peor que el Desfile…

el ensayo. Nos encontramos a las puertas de la sonada o en este caso asonante, celebración de independencia en Guatemala. Lo peor que se tiene antes de esta celebración del 15 de septiembre es el ensayo de sus desfiles. Realmente nunca estuve de acuerdo con ese tipo de celebraciones, comenzando por la absurda idea de hacer caminar a estudiantes de todas las edades, bajo el abrazante sol de septiembre, solo para que los adultos los vean. ¿Se ha visto acaso entretenimiento más absurdo? Por otro lado el sonido de los redoblantes y bombos es simplemente fastidioso. Y su ensayo en los colegios e institutos es peor. Cerca de la casa, los chicos se han tomado la molestia de ensayar tarde con tarde. Alterando los nervios y la tranquilidad del bosquecillo cercano. A la casa estos días ya no llegan aves al patio. Actitud que yo también tomaría si pudiera alejarme de tanta contaminación auditiva. Desafortunadamente el guatemalteco no puede dejar de relacionar las fiestas patrias con los militares